Atrapado en el tiempo

Sportig-Nastic  en 2.005
Desolador el aspecto de la grada este.

Sábado, 11 de junio de 2.005, el Sporting de Marcelino García Toral, en su segunda temporada en el banquillo, juega el último partido en casa contra el Nastic de Tarragona, David, con siete años, y su equipo de fútbol sala prebenjamín tiene cita para hacerse una foto con el equipo, ajenos a todo el ambiente que hay en torno al partido.

Después de una temporada de lo mas irregular, y tras semanas sin jugarse nada, sin opciones de ascenso, un grupo de desalentadores, convoca una protesta en la puerta cero del estadio, con escasa repercusión, apenas cien personas. Muchos entran tarde al partido, dentro muy poco público, no creo que llegásemos a los 5.000 espectadores.
Desde la grada joven, al grito de "jugadores mercenarios" se desvía la atención del palco al césped. En el mismo fondo sur, dos paisanos, ajenos a Ultra Boys, acaban a tortas, interviene la policía.

En el campo, un desastre, el Nastic amarga aún mas la despedida del Molinón endosándonos un bochornoso 0-3, pitos y muchas dudas con respecto al futuro. Poco después el club entra en el proceso de la Ley concursal. El resto de la historia ya la conocéis.

Ocho años después, la vida sigue igual, o peor. Los mismos dirigentes, ocho años mas ricos y el domingo se prevee de nuevo una buena fiesta. 

Después del oasis que supuso la estancia de Manolo Preciado en el banquillo y el regalo de vivir cuatro años en primera, nos preparamos para otra larga travesía del desierto, de momento ya lograron echar a la gente del Molinón.

¿Qué será lo siguiente? ¿Hasta cuando piensan seguir equivocándose? A este paso lograrán enterrar mas de cien años de historia, y lo peor nosotros seremos sus cómplices.

Por cierto David, ocho años después, me pide que le compre una bufanda verde y amarilla, ya no es ajeno a la realidad que vive el Sporting.

Hoy mas que nunca.

¡¡¡¡PUXA SPORTING!!!!