Cerrado por incompetencia

Observo con cierto desánimo y desilusión todo lo que está pasando alrededor del Sporting, si al desastre en lo deportivo, unimos la incompetencia de los que dirigen la institución, llegamos a la caótica situación actual.

Ayer se cierra Mareo y no se permite el paso de los aficionados a ejercer lo único que nos queda, el derecho al pataleo. Hoy el Molinón aparece lleno de pintadas.

Y mientras tanto los que dirigen el club, ahí siguen, sin querer enterarse de lo que pasa, aferrados al puesto y llevándonos directos a un pozo sin fondo.
Que el club necesita un cambio en la dirección, es algo que sabemos todos de hace tiempo, el problema es que la sociedad deportiva no es de la afición, es de quien tiene las acciones y en su contra poco se puede hacer y menos si no existe un mínimo de unidad entre aficionados, peñas, informadores..., sin unidad nada es posible.

Imagen de Golaverage.com

Lo realmente triste de esta situación es que la sufrimos quienes de verdad sentimos algo por esos colores, yo creía que cuando subimos en 2.008, todo iba a cambiar, se saneaba el club con los ingresos que genera jugar en primera, se invertía en lo deportivo y se creaba un proyecto de futuro, pero no, todo fue a menos. 

Se ingresó dinero y no se invirtió en lo deportivo. Se descabezo la plantilla al no renovar a Diego Castro, que no era Di Stefano, pero era un líder dentro y fuera del campo, eso que estos días se echa de menos. Se destituyó al entrenador que había devuelto la ilusión a la ciudad, y que había hecho milagros con plantillas muy justitas. Con el descenso no se renovó a otro líder otro tipo con peso fuera y dentro del campo, Alberto Rivera y se vendió que íbamos a subir sin problemas.

El resultado de esta magnifica planificación ahí está, en la tercera jornada de la segunda vuelta, estamos a dos puntos del descenso, peor incluso de la temporada del anterior, y traumático, descenso. Peor imposible.

Se avecinan tiempos duros, la afición está harta y el equipo ahora necesita de la afición para tirar del carro. Mil aficionados en el desplazamiento a Lugo, confirman que nosotros no abandonamos al equipo, otra cosa será el Molinón donde seguro que va a volver la música de viento, el problema es que la gente se va desahogar con quien tiene mas cerca, los jugadores, y los verdaderos culpables mientras tanto a verlas venir y a seguir chupando. 

O ganamos alguno de los dos próximos partidos, o el siguiente en caer será Sandoval, al tiempo. Cortando cabezas se calma a la plebe.

¿Aguantaremos esto durante mucho tiempo? Por el bien del Sporting espero que no.

¡¡¡¡PUXA SPORTING!!!!